El anasuromai es el impulso somático instintivo de enseñar la vagina para restablecer el orden sobre la Tierra, cambiar la energía y/o espantar espíritus malignos, como narrado en el mito griego de Belerofonte o el de Baubo, la práctica ancestral de Madras, India, y en el folclor de muchas culturas, en el que se reclama la vagina como una poderosa herramienta de afirmación y transformación. Esta práctica se viene replicando inclusive en la actualidad como un acto de transgresión y protección.

Otro acto somático impulsivo de los humanos, que se manifiesta desde la niñez, es el de sacar la lengua. Sacamos la lengua para defendernos, a modo de talismán protector, ante situaciones de ofensas, ataques, pero también como gesto cómico para hacer reír. Intenta provocar un cambio energía.

Este acto de sacar la lengua considero que es un gesto primo del anasuromai. Desde lo impúdico, ambos protegen mientras ahuyentan, como un exorcismo ante una situación amenazante, espantando desde adentro hacia fuera y repelando la energía no deseada. Pero a la vez invita y seduce cuando hace ese despliegue de poder.

Estando rodada de la exuberancia tropical, confirmo cómo las flores, sin censura, incurren en un anasuromai constante, sacándonos sus lenguas y enseñándonos sus genitales, trabajando constantemente por cambiar la energía. Pero la flores nos despliegan un anasuromai con una explosión de color y belleza que lo intensifica y nos seduce pudiendo posicionarse en lugares de importancia y visibilidad que las vaginas y las lenguas humanas no son “apropiadas”: el centro de la mesa, la entrada del hogar, los altares, los podios, los obsequios, etc. El color en la vegetación tropical existe justamente para seducir.

En la obra, represento ambos actos en forma de una Diosa conformada por diferentes partes de flores coloridas inventadas pero familiares en un ambiente de sensualidad tropical. A través de un anasuromai de colores, Diosa Lenguona pretende cambiar la energía de las personas que la miran y los lugares que resguarda.

Anasyrma is the instinctive somatic impulse to show the vagina to restore order on Earth, change the energy and / or scare away evil spirits, as narrated in: the Greek myth of Bellerophon or that of Baubo, the ancestral practice of Madras, India, and in the folklore of many cultures, in which the vagina is claimed as a powerful tool for affirmation and transformation. This practice is being replicated even today as an act of transgression and protection.

Another impulsive somatic act of humans, which manifests itself from childhood, is sticking out the tongue. We stick out our tongues to defend ourselves, as a protective talisman, in situations of offenses, attacks, but also as a comic gesture to make people laugh. Trying to cause an energy shift.

I consider this act of sticking out the tongue to be a cousin gesture of the Anasyrma. Sprouting from the non chaste, both protect while driving away, like an exorcism in the face of a threatening situation, frightening from the inside out and repelling the unwanted energy. But at the same time, it invites and seduces when it makes that display of power.

Having grown surrounded by tropical exuberance, I can confirm how the flowers, without censorship, incur in a constant Anasyrma, sticking out their tongues and showing us their genitals, constantly working to change the energy. But the flowers unfold us an Anasyrma with an explosion of color and beauty that allows them to position themselves in places of importance and visibility where human genitals are not “appropriate”: the center of the table, the entrance to the home, altars, podiums, gifts, etc. The color in tropical vegetation exists just to seduce.

In this painting, both acts appear in the shape of a Goddess made up of different parts of, invented but familiar colorful flowers in an environment of tropical sensuality. Through an Anasyrma of colors, Diosa Lenguona tries to change the energy of the people who look at her and the places that she protects.

Carnaval es una composición de imágenes diseccionadas de coloridas flores inventadas pero familiares, inspiradas por el entorno tropical que me rodea.

La exuberancia de las flores se manifiesta en un exhibicionismo de partes reproductivas sin censura en su expresión, que constantemente busca atención con una explosión de colores y formas que fascina. La saturación de colores y complejidad de sus diseños, existen justamente para seducir.

A diferencia de los genitales de los seres humanos que son cubiertos, escondidos y considerados inmorales,  las flores en su carnaval exhibicionista son posicionadas en lugares de gran distinción y visibilidad,  y son utilizadas para honrar hasta los ritos más solemnes como muertes, nacimientos, matrimonios, graduaciones, etc. 

Yo las represento en busca de un estandarte de sinceridad hacia la naturaleza sexual de todos los seres vivos.

Carnival is a composition of dissected images of colorful invented but familiar flowers, inspired by the tropical environment around me.

The exuberance of the flowers is manifested in an exhibitionism of their reproductive parts without censorship in its expression, which constantly seeks attention with an explosion of colors and shapes that fascinates. The saturation of colors and complexity of its designs exist precisely to seduce.

Unlike the genitals of humanbeings that are asked to be covered, hidden and considered immoral, the flowers in their exhibitionist carnival are positioned in places of great distinction and visibility, and are used to honor even the most solemn rites such as deaths, births, marriages. , graduations, etc.

I represent them in search of a banner of sincerity towards the sexual nature of all living beings.